13/3/12

Relatos de enero

BrunoCiampi



...Se nubló mi pupila, se aceleró mi pulso, aumentó mi respiración... temblaba; y la sensación de dar vuelta entre las cosas imperaba en mi mente. ¿Qué hacer? Desmayarme. 

Mientras, mi cerebro ansía despertar con amnesia retrógrada para que el corazón salga de la boca y regrese al tórax. Para que mis síntomas se calmen y pueda sonreír pacíficamente. Sí, lo sé. No, en realidad no...



Entre otras cosas, fue más ocurrente de lo que pensé.
Su voz me conducía a pasadizos secretos que revelaban bienestar, seguridad, todo y nada a la vez.

El corazón estaba en mi boca. Sentía cada palpitación como un derrumbe de emociones frente a lo que sería mi historia con el mundo.

Tuve ganas de vomitar. Vomité todo tipo de palabras. Esperaba algún oído dispuesto a escucharlas. Para mi sorpresa estuvieron 2500 oídos sordos sonriéndome, dispuestos a escucharme.
Irónico.



- "Usted es muy complicada. Pudo haberlo hecho mejor."



a r i a n a 

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