27/5/11

A ese miedo que paraliza a mi destino, mis más sonoros aplausos sarcásticos.

Es sano estar sobre la página de inicio otra vez. En esta ocasión, me encuentro adjuntada al texto de sus decisiones. ¿Es sano estar en ese inicio? ¿Es deplorable estar  inmersa en una decisión impulsiva que traiciona al alma?
Usted, por su parte, casi pierde un trozo de su esencia por sólo planear aquel capricho insensato de “quererme”; al creer que me besaba con aquellos labios de amor y no de tristeza. Aquellos que, abrieron puertas a mis sentidos más inesperados y casi odiados; esos que me hicieron creer que lo esperaba.
Sí, entre muchas cosas que NO esperaba, está el miedo palpitante en mi boca; el que teme decir palabras inapropiadas, el que no DESEA ver todo con sinceridad, el que sueña con no soñar cuando duerme.
No escribo esto para usted, lo escribo para mis miedos, en un acto desesperado de ahuyentarlos. Quiero que se alejen pero vuelvan, vuelvan cuando sea debido y realmente los espere y no ahora, cuando sólo me quitan la felicidad (ficticia) que me sucumbe al pensar en “eso”  –suena imposible- . ¿Tú/Usted/él, piensa/s en ello?
A ese miedo que paraliza a mi destino, mis más sonoros aplausos sarcásticos.

P.D: No leas esto, por favor.
Fuente-imagen: Javier Villamizar Pinto http://www.villamizarpinto.com/pages/retrospectiva-1-4.html
Por: Daniela R. @sodaniela

2 comentarios:

  1. "No escribo para usted, escribo para mis miedos". Sí, me pasa. ¡Mucho! Casi todo lo que escribo se lo dedico a mis miedos. Pero no se van...

    ResponderEliminar
  2. Me gustó, no sé si eso esté bien o mal... pero....

    ResponderEliminar